Indetectable = Intransmisible: el rol del laboratorio en el cuidado integral del VIH

17.12.2025

Indetectable = Intransmisible: el rol del laboratorio en el cuidado integral del VIH

La evidencia científica es contundente: una persona que vive con VIH y mantiene su carga viral indetectable gracias al tratamiento adecuado no transmite el virus por vía sexual. Este concepto, conocido como Indetectable = Intransmisible (I=I), representa uno de los avances más importantes en la salud pública de las últimas décadas y demuestra el impacto directo que tiene el acceso a diagnóstico, tratamiento y controles de calidad.

Pero detrás de cada resultado, de cada medición y de cada decisión clínica, existe un pilar esencial: el trabajo del laboratorio. Los estudios de laboratorio no solo permiten detectar el VIH, sino también acompañar la salud de las personas de forma continua, personalizada y basada en evidencia.

A continuación, repasamos cómo el laboratorio participa en todas las etapas del cuidado integral.

DIAGNÓSTICO TEMPRANO: DETECTAR A TIEMPO SALVA VIDAS

La detección precoz es la puerta de entrada al tratamiento. Hoy contamos con tecnologías que reducen significativamente la ventana inmunológica, permitiendo identificar la infección en sus fases más tempranas:

- Pruebas de 4ª generación: combinan detección de anticuerpos y del antígeno p24, acortando el período de incertidumbre.

- PCR o pruebas de carga viral cualitativas y cuantitativas: detectan directamente el material genético del virus, incluso antes de que el organismo produzca anticuerpos.

Un diagnóstico temprano facilita un inicio rápido de la Terapia Antirretroviral (TAR), lo que reduce la replicación viral, mejora la salud del paciente y disminuye la posibilidad de transmisión.

 

MONITOREO DE LA PROGRESIÓN: CONOCER EL ESTADO DE LA  INFECCIÓN 

Una vez iniciado el tratamiento, el laboratorio realiza controles periódicos esenciales para evaluar la evolución clínica:

- Carga viral: indica la cantidad de virus en sangre. Lograr y sostener una carga viral indetectable es el principal objetivo del tratamiento.

- Recuento de linfocitos CD4 y CD8: permite conocer el estado del sistema inmunológico y anticipar riesgos o complicaciones.

Estos estudios no sólo guían las decisiones médicas, sino que brindan información clave para que la persona pueda comprender y acompañar activamente su propio proceso de salud.

 

SELECCIÓN Y AJUSTE DEL TRATAMIENTO: MEDICINA PERSONALIZADA

No todas las terapias funcionan igual en todas las personas. Por eso, el laboratorio tiene un rol central en la individualización del tratamiento:

- Pruebas de resistencia: identifican mutaciones del virus que podrían disminuir la eficacia de ciertas drogas.

- Controles de adherencia a través de carga viral: permiten evaluar si el tratamiento está funcionando adecuadamente.

Gracias a estos estudios, los equipos de salud pueden elegir la opción terapéutica más efectiva y asegurar la continuidad del estado de indetectabilidad.

 

ABORDAJE INTEGRAL: DETETAR COMORBILIDADES Y COINFECCIONES

El laboratorio también cumple una función clave en la detección de condiciones que pueden coexistir con el VIH:

- Hepatitis virales (A, B, C) 

Otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) como sífilis, gonorrea y clamidia.

 - Marcadores metabólicos, renales y hepáticos para evaluar efectos del tratamiento o condiciones asociadas

Un abordaje integral permite anticipar complicaciones, adaptar tratamientos y garantizar una atención realmente centrada en la persona.

 

INDETECTABILIDAD: UN LOGRO COMPARTIDO ENTRE QUIENES SE TRATAN Y QUIENES CUIDAN

Lograr una carga viral indetectable no es solo un indicador clínico. Es una meta que transforma vidas: permite mantener la salud, prevenir el desarrollo del SIDA y eliminar el riesgo de transmisión sexual.

Cada uno de estos pasos —diagnóstico, monitoreo, tratamiento y control de comorbilidades— es posible gracias al trabajo coordinado entre los equipos de salud y el laboratorio.

En el Laboratorio CEUSA no solo procesa muestras: acompaña, informa, cuida y contribuye a cortar la cadena de transmisión del VIH, sosteniendo uno de los avances más importantes de la salud pública global.